El 4G nos permitió mejorar las funcionalidades que ya teníamos. Sin embargo, la introducción del 5G trae nuevas oportunidades de negocio y servicios de valor añadido, gracias a su baja latencia y su capacidad para conectar millones de dispositivos en un área reducida. En el sector del agua, la operación autónoma de las infraestructuras, la conducción en remoto o el uso de datos en tiempo real van a marcar la diferencia durante el 2021, evidenciando cómo ayudará el 5G a la gestión de infraestructuras del ciclo integral del agua.
En distintas partes del mundo ya se están poniendo en marcha las primeras experiencias piloto de 5G. Sabemos que en el futuro habrá una explosión en el número de sensores utilizados en los hogares y en las ciudades. Según la consultora Gartner, en 2022 habrá unos 26 mil millones de dispositivos conectados. Para que esto sea posible, es necesario apostar por el 5G.
Los principales frenos a superar durante este año van a ser la disponibilidad de la cobertura y la reticencia todavía existente a la adopción de esta tecnología, que en cualquier caso no viene a sustituir a las anteriores, sino a complementarlas. El 5G aterrizará con fuerza durante el 2021 en el inevitable camino de la transformación digital.
1 – NB-IoT aplicado a smart metering
La aplicación de la tecnología NB-IoT está empezando a dar resultados excelentes en el sector del agua, principalmente en el área de telelectura o smart metering. Frente a otras soluciones más tradicionales con protocolos propietarios o de tecnologías LPWAN, como SigFox o Lora, el NB-IoT utiliza la cobertura de un operador de telefonía y requiere de tarjetas SIM para funcionar.
La transmisión de datos mediante NB-IoT resulta una opción muy interesante cuando el número de tarjetas SIM a implementar no es demasiado elevado, ya que también debemos tener en cuenta su mantenimiento. El NB-IoT ha sido adoptado por parte de la GSMA y la asociación de estándares 3GPP como parte de la familia 5G, lo que le garantiza una vida relativamente larga. Sus principales ventajas en relación al smart metering son su mayor alcance, penetración y cobertura, así como una gestión más eficiente de la batería.
2 – MIoT (Massive IoT) y Critical IoT
La aplicación del 5G abre nuevos horizontes en todos los sectores. En la gestión del agua, el Critical IoT o Industrial IoT, impulsará la gestión eficiente de las infraestructuras gracias al desarrollo de algoritmos de toma de decisiones en tiempo real. La operación autónoma de las plantas y el riego, y la conducción de robots mediante 5G, serán algo habitual en la industria 4.0. o smart factories.
La disrupción que va a suponer el 5G traerá nuevas oportunidades de negocio y profesiones hasta ahora desconocidas. En comparación con la evolución del 3G al 4G, en este caso no solo se mejorará la gestión actual de las infraestructuras, sino que nos permitirá desarrollar nuevas funcionalidades. Los datos de los procesos de negocio podrán ser utilizados en tiempo real para ayudarnos a mejorar en la toma de decisiones.
Participando en la definición del ecosistema 5G que necesita la empresa, la red se adaptará a cada operador, pudiendo crear redes privadas. Además, ante el manejo de una infraestructura crítica, esta tecnología va a garantizar la ubicuidad de la red, es decir, una cobertura sin interrupciones. Antes, la empresa debía adaptarse a la red. Ahora, es la red la que se podrá adaptar a las necesidades del usuario.
En relación al control remoto, una aplicación muy interesante para el sector del agua es la conducción en tiempo real de drones, por ejemplo, para la inspección del alcantarillado o el funcionamiento del riego.
Ante el avance de la sensorización, el MIoT va a garantizar la coexistencia del smart metering con la digitalización no solo de otros contadores, sino también de los dispositivos inteligentes en los hogares y en las calles. Uno de los escenarios más importantes que nos trae el 5G es poder conectar millones de dispositivos en un área reducida.
3 – Edge computing
Una de las ventajas del 5G se deriva de su fusión con nuevas tecnologías. El edge computing o cloud computing permite procesar los datos que produce cada dispositivo más cerca del origen, de donde se han procesado. Esta cuestión, que en un principio puede parecer menor, permite reducir la latencia, liberar la carga de tráfico en la nube y agilizar el análisis de datos en tiempo real. Frente a las largas distancias que recorren nuestros datos en la actualidad, esta nueva forma de transmitir la información abre nuevas posibilidades en todos los sectores. En este aspecto también queda reflejado cómo ayudará el 5G a la gestión de infraestructuras del ciclo integral del agua.
4 – Network slicing
La personalización de las redes, es decir, su creación como redes privadas que se ajustan a las necesidades de cada empresa, es ya una realidad. El network slicing ofrece una garantía de servicio, aumentando su calidad y fiabilidad. En el futuro, cualquier instalación podrá tener su nodo 5G propio, que suministrará un network slice o segmento de la red específico, adaptado a sus particularidades.
El informe Global Water Trends 2021 de Idrica recoge un listado exhaustivo de todas las tendencias que esperamos ver en el sector, incluyendo cómo ayudará el 5G a la gestión de infraestructuras del ciclo integral del agua.
Carlos Tejedor, Instrumentation & Smart Metering Specialist, Idrica