Tendencias en la gestión de EDARs en 2021: decisiones automáticas, anticipadas y sostenibles

Las tendencias en la gestión de EDARs en 2021 forman parte de la evolución de este tipo de infraestructuras. El descubrimiento de los fangos activos por parte de los ingenieros E. Arden y W. Lockett a principios del siglo XX supuso un cambio en el paradigma establecido en el campo de la depuración de las aguas residuales, sentando las bases para un avance tecnológico que cambió de manera definitiva nuestra relación con el entorno. Las ciudades dejaron de tener características insalubres y los cauces hídricos altamente degradados desde la Primera Revolución Industrial empezaron a recobrar su biodiversidad.

No obstante, en un entorno cada vez más cambiante, las depuradoras se enfrentan a nuevos retos que ponen a prueba su capacidad de adaptación y resiliencia haciendo necesario progresar en la sensorización, la digitalización, la ruptura de los silos de información y la automatización en la toma de decisiones.

Las utilities públicas y privadas se enfrentan cada vez más a una mayor limitación de los recursos económicos para gestionar las instalaciones. El endurecimiento de los requisitos de calidad del efluente de las plantas y de los lodos generados exigen una mayor precisión en la operación de los procesos. La inaplazable preocupación en el medioambiente está desembocando en una necesidad de minimizar el impacto de las instalaciones medida en términos de emisiones de gases de efecto invernadero, olores y ruido. Por último, existe un creciente interés en la gestión de activos a lo largo de todo su ciclo de vida.

Más importante todavía resulta alcanzar una toma de decisión en las depuradoras que armonice las 4 vertientes señaladas. En este sentido, las nuevas posibilidades en conectividad y gestión de datos otorgados por la Industria 4.0 abren nuevos horizontes en la gestión de las depuradoras.

Hasta ahora, distintas plataformas controlan estas áreas de forma individual, generando ineficiencias en la gestión. El futuro pasa por una gestión centralizada, a través de plataformas que sean capaces de monitorizar y conectar todas las variables en tiempo real y ayudar en la toma de decisiones en cada uno de los cuatro pilares. Estas son las principales tendencias en la gestión de EDARs en 2021.

1 – Integración de datos en Smart SCADAs

En la actualidad, los sistemas de automatización industrial existentes en las depuradoras son una pieza fundamental para su operación diaria. Sin embargo, estos sistemas requieren una evolución hacia una solución que permita desplegar toda la potencialidad de la incipiente industria 4.0.

La sensorización de todos los dispositivos es el primer paso para lograr la centralización de los datos relevantes para el gestor de la EDAR. La dirección adecuada de estas infraestructuras, cada vez más complejas, requiere incorporar datos de distintas fuentes, tanto internas (LIMS, GMAO, SCADAs, dispositivos de campo), como externas (datos meteorológicos y redes sociales, principalmente) en un único punto.

Romper los silos de información interconectando todos los orígenes de datos permite tener una visión más holística de la operación y ayuda a extraer el valor de los datos para mejorar la toma de decisiones.

Las nuevas formas de integrar los datos sensorizados están orientadas a lograr la escalabilidad y conectividad, buscando ser intuitivas y configurables para el usuario, adaptándose a las particularidades de cada EDAR.

Trends in WWTP management for 2021

2 – Decisiones automáticas y con anticipación

Los algoritmos y modelos matemáticos, aplicados sobre los datos centralizados, van a permitir a los gestores recibir recomendaciones de las siguientes acciones a llevar a cabo. El criterio, basado en la experiencia y en la optimización del funcionamiento de la planta, permite anticiparse a problemas teniendo en cuenta distintos factores, como la meteorología o el nivel de contaminantes esperado.

Esta funcionalidad es relevante para prácticamente todos los aspectos relacionados con el funcionamiento de las depuradoras, desde la generación de olores hasta la gestión de los activos, cuya vertiente predictiva es posible gracias a la monitorización en continuo de los parámetros relacionados con su vida útil (LCA). Los gestores podrán conocer el estado y recibir alertas sobre la degradación de los activos, antes de que estos fallen. De esta forma, será posible sustituir los equipos sin interrupciones en el servicio.

Un paso más en esta tendencia es la toma de decisiones automática: el sistema tiene en cuenta todas las variables para activar de forma autónoma las acciones necesarias en la planta. La autocalibración de los modelos matemáticos, atendiendo a las condiciones en constante cambio, es un hito que solo la incorporación de algoritmos al sistema puede conseguir.

3 – Economía circular y una mayor apuesta por la sostenibilidad

Las demandas de la población hacia la sostenibilidad son cada vez mayores, y esta tendencia incluye a las EDAR. Cada vez más se toman medidas encaminadas a la reducción de los gases de efecto invernadero y de la huella de carbono de la planta.

Los objetivos de calidad se han ampliado, y ya no es suficiente obtener una buena calidad del agua y del lodo generado al menor coste posible, sino que los gestores deben tener en cuenta otros aspectos. Por ejemplo, que las instalaciones minimicen sus emisiones de ruido y olores.

Las EDAR tienen un papel destacado en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. La tecnología puede ayudar a reducir la contaminación del agua, eliminando los vertidos y minimizando la emisión de productos químicos y materiales peligrosos.

El informe Global Water Trends 2021 de Idrica recoge un listado exhaustivo de todas las tendencias que esperamos ver en el sector, incluyendo las tendencias en la gestión de EDARs en 2021.

Jacobo Illueca, Wastewater Consultant, Idrica

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